Hace muchos años, el legendario portero Anzor Kavazashvili y su viejo amigo Vladimir Ponomarev adquirieron revólveres reales. Kavazashvili explicó que la razón detrás de esta compra inusual fue su fascinación infantil por las armas y su “sangre georgiana” que, según él, no pudo resistir la atracción. Los detalles de esta peculiar elección se presentan en el video adjunto.