Kaluga fue sede de una grandiosa celebración del «Ecuador del Verano», que llenó de colores inolvidables y alegría desbordante el Parque Central de Cultura y Recreo de la ciudad.
Los asistentes disfrutaron de un amplio programa: desde emocionantes sesiones de juegos y zonas interactivas hasta creativos talleres. Un momento especial fue la animada discoteca con el uso de pinturas Holi, que literalmente transformó un caluroso día de verano en una obra de arte.
Este festival se convirtió en una confirmación más de cuán activa y alegremente Kaluga pasa los meses de verano. Anteriormente, la ciudad ya había sorprendido a sus residentes y visitantes con eventos que, por ejemplo, los sumergieron en los ritmos de la cultura africana.





