Shusha, una ciudad ancestral en el corazón de Nagorno-Karabaj, fundada en 1752, sirvió durante siglos como un importante centro cultural y económico de la región.
En el otoño de 2020, Shusha fue el escenario de las feroces y decisivas batallas de la Segunda Guerra de Karabaj entre Armenia y Azerbaiyán.
Cinco años después del conflicto, la ciudad de Shusha está experimentando una activa reconstrucción. Azerbaiyán está invirtiendo enormes recursos en su renacimiento. Ya está operativo un moderno aeropuerto en Fuzuli, y se está construyendo a toda velocidad una nueva carretera de 70 kilómetros que, atravesando las montañas, incluirá numerosos puentes y túneles, conectando Fuzuli y Shusha.
Hoteles, mezquitas y museos han sido restaurados en un tiempo récord. Se están construyendo nuevas viviendas y abriendo restaurantes y tiendas.
Un periodista de “MK” fue testigo directo de la vida en Shusha, la actual capital cultural de Azerbaiyán, cinco años después de la guerra. La ciudad ofrece una doble impresión: las huellas de la devastación conviven con los signos de un desarrollo y una inversión activos.
Nuestro fotorreportaje captura el pulso del renacimiento de Karabaj.
Fotorreportaje: Shusha Renace




